La transición a la canción de concierto, su amistad con Manuel de Falla y una gr
Aún en la actualidad, el nombre de María Barrientos resulta desconocido para buena parte del público. Sin embargo, esta cantante española fue una de las sopranos más aclamadas y exitosas del primer tercio del siglo XX, actuando en los mejores teatros del mundo y protagonizando numerosas grabaciones discográficas a lo largo de su vida. Nacida en Barcelona en 1884, debutó sobre las tablas del Gran Teatro del Liceo en 1899, con solo quince años, y logró convertirse en una figura especialmente reconocida tras su debut en el Teatro alla Scala de Milán en 1904. Fue considerada la estrella del Metropolitan Opera House de Nueva York en las temporadas 1916-1920, logrando siempre el reconocimiento del público y el favor de los críticos.
Ahora bien, además de trabajar en la ópera durante veintiséis años, Barrientos también dedicó una parte de su vida a la difusión de la canción lírica. De hecho, la grabación que ha logrado mayor popularidad es aquella en la que interpreta las Siete canciones populares españolas de Manuel de Falla, impresionada entre 1928 y 1930, que cuenta con el acompañamiento pianístico del propio compositor.
Este volumen nace con la intención de continuar reivindicando la figura de María Barrientos, en esta ocasión analizando su vinculación a la canción de concierto a través de esta composición. En concreto, a través de una profunda investigación, se realiza un recorrido por la adscripción de la soprano al mencionado género, se presenta el origen de la alianza profesional y de la amistad con Falla y, finalmente, se expone el interés performativo de Barrientos por las Siete canciones populares españolas y las circunstancias que rodearon su grabación, vestigio fonográfico que se ha convertido en una referencia de la obra falliana.
